El elegido para ello es el argentino DIEGO
MILITO, que vendría a sustituir las vacantes que producirán las salidas de sus compatriotas Julio Cruz, Hernán Crespo, y probablemente la del nigeriano Obina.El interés del portugués por el mayor de los hermanos Milito no es nuevo, ya que lo ha seguido a lo largo de las dos últimas temporadas que ha disputado en el REAL ZARAGOZA.
“El principito” apodado así por su gran parecido físico con el gran Enzo Francescolli, llegó a tierras aragonesas para cubrir el hueco dejado por David Villa. Superando los goles que este había logrado en liga. Este verano volvió al club del magnate juguetero Preziosi, el Genoa, dónde ya antes había tenido la primera aventura en Europa.
Su gran COMPLEMENTARIEDAD para adaptarse a los distintos sistemas ofensivos y defensivos de juego, sus características físicas y su inteligencia para moverse con y sin balón, han sido las notas predominantes para que Mou haya pedido a Máximo MORATTI la contratación del delantero centro como pieza clave para asaltar la Champions.
El rol que desarrollaría, sería el que viene desempeñando a lo largo de toda su carrera, es decir un trabajo generoso para que otros compañeros puedan rendir tanto como él, en este caso se buscaría liberar de tareas defensivas al delantero sueco.
Su próximo entrenador quiere un delantero capaz de caer a las bandas para abrir huecos que permita la entrada desde el centro de otros jugadores, un delantero con condiciones de goleador y buen cabeceador, y que tenga cambio de ritmo para jugar el sistema de calcio que desarrollan los equipos de Mourinho.
Y lo ha encontrado. Este año vive un poco más al Sur (a unos 140 Km).
Es sin duda uno de los mejores delanteros centros del planeta fútbol del momento. Y el equipo de Lombardía quiere volver a conseguir el máximo título europeo 45 años después (esta temporada no lo puede lograr).
Un objetivo para el que lleva luchando a golpe de talonario desde 1965, contratando a los mejores extranjeros del momento. Ni Ronaldo, ni Baggio, ni Figo, ni Verón, ni Djorkaeff, ni Batistuta, ni Bergkamp, ni Klinsman, ni Zamorano, ni Schillachi, ni Suárez, ni tantos otros, lograron marcar los goles necesarios para alcanzar el éxito que lograron Meazza o Mazzola, edificando el nuevo club lombardo y ganando las 2 Copas de Europa respectivamente.
¿Será Diegol capaz de ayudar a conseguirlo?
